Rock is dead

En los noventa había que escuchar rock and roll. Empezar con alguna bandita local, mechar algún clásico setentoso y comprarte alguna remera en Locuras con el logo de un grupo fetiche.

Recién ahí tenías derecho a sentarte en la puerta de lo del ruso, el primero que tuvo un equipo más o menos pulenta. Sacaba los parlantes por la ventana y escuchábamos un par de veces seguidas el disco cuatro de Led Zeppelin. Los más grandes fumaban, comentaban pasajes de la guitarra de Page y arriesgaban historias sobre el cantante: “Robert Plant tenía una dentadura de mierda y cuando se la hizo corregir le quedó la voz así”.

El paso final era agarrar una viola, tirar Re, Sol, La y listo, a rockear. La pentatónica era la escala divina. El que la subía y la bajaba sin tropezar alcanzaba un protagonismo envidiable.

El rock era un paradigma Kunhiano, fuera de él todo era reducido a la pura negatividad.

Ahí afuera estaba la cumbia con sus morenas pulposas como las sirenas mitológicas de la Odisea. El ruso subía el volumen y los parlantes saturaban. Él era el Ulises del barrio y el resto los marineros amenazados por el canto hechicero.

Hoy pasé por una disquería de Liniers que estaba pasando un temazo de Ráfaga y pensé dos cosas. La cumbia melódica de los noventa es un género del carajo. Y Richard, estrella de las seis cuerdas tropicales, le pasa el trapo a más de un rockerito.

4 comentarios:

Soledad Jácome dijo...

"esta agüita de verano a ti te gustara,
este ritmo de verano te enloquecerá..."

Quién lo diría...Ventarrón confesándose seducido por el canto de las sirenas. Me lo imagino al Ulises de su relato atado al mástil del rock para no caer en la tentación cumbianchera.

Mi opinión: no hay que taparse los oídos. Reprimirse es más peligroso que estrolarse contra las rocas tropicales de la música.

rivito dijo...

richard es slash
y para los primeros visos de romance en una pista de baile: la cumbia

leticia dijo...

puf, siempre derrochando alta erudicción ¿cómo es el paradigma kuhniano???
eso en el cbc juro que no lo vi.

y sí...hay que admitir que algunas cumbias están muy pulentas...salvo cuando la tenés que aguantar viajando en el tren, por algún fana que pone su celu, con pésimo sonido, a todo lo que da.

Trefo dijo...

¡Me extraña Leti! ¿No repasás los módulos de IPC?
El paradigma es ese manto se desarrollan los períodos de ciencia normal. Ahí los científicos la pasan re tranca, investigando lo que el paradigma manda y obteniendo las respuestas que el mismo les dicta. Una ganga.
Pero en un momento algunos empiezan a cuestionar al paradigma con frases como “¡ma’ esto no sirve para nada. Este manto tiene un montón de agujeros! Esto no va ni para atrás ni para adelante”, y ahí se arma la gresca (llamada por Khun “batahola científica”) entre los conservadores y los rebeldes.
Si los segundos se imponen se produce una revolución científica y a otra cosa mariposa.
La metáfora no quizás no sea muy efectiva para mi historia (¿Ariel Pucheta como el científico rebelde?), pero me sonó linda.